No Todo es lo que Parece
Siempre hemos estudiado que el arcano mayor El Loco representa la libertad y, por ende, se trata de una persona incomprendida por la sociedad. Todos los créditos se los lleva este emblemático personaje, dejando a su entorno como un injusto castigador de alguien con alma de artista e ideas pertenecientes a otros tiempos. Sin embargo, El Loco encierra todo un lado oculto que dista mucho de todo el romanticismo al que nos hemos acostumbrado a asociarlo.
El Loco, un Arcano Oscuro
La personalidad de este arcano es intrincada y su energía, si bien trae los vientos de la libertad, no siempre respeta este mismo valor en los demás.
Cuando sale El Loco en una tirada, si bien todo dependerá del lugar en el que aparezca, estamos ante un problema.
Personalidad: cuando aparece en la casa de la persona o personalidad, nos está alertando acerca de alguien sin rumbo ni metas establecidas. Esto puede llegar a ser un problema, ya que si es nuestro hijo, nos costará mucho encauzarlo, en el caso de que se trate de nuestra pareja, nos complicará mucho para afianzar la relación y formar una familia, mientras que si somos nosotros mismos, quiere decir que nos estamos comportando de forma egoísta, pero que carecemos de la sensibilidad para darnos cuenta y aceptar el error.
Amor: en la casa del amor nos anuncia una relación tormentosa, repleta de idas y venidas, rupturas y reconciliaciones. Cada vez que nuestra pareja vuelve a nosotros, albergamos la esperanza de que está aquí porque ha cambiado y ahora sí está dispuesto a iniciar una vida en conjunto, con todas las responsabilidades que esto implica. No obstante, no tardamos mucho tiempo en comprobar que estamos ante la misma persona errática de siempre y eso nos decepciona profundamente.
Trabajo: en este caso la persona no es capaz de retener un trabajo. Lo peor del asunto es que no tiene el sentido común suficiente para darse cuenta de que la falla proviene de su parte, entonces tiene la tendencia de culpar a sus empleadores, a quienes tilda de déspotas e intolerantes. Bastará con sólo echar un vistazo a su comportamiento en el ámbito laboral para darse cuenta que es una persona que falta frecuentemente y sin un justificativo de peso, llega tarde con más frecuencia de la conveniente, no tiene el mejor relacionamiento con sus colegas y, como si esto fuera poco, no es muy adepto al trabajo en sí mismo y se abandona a la pereza cada vez que puede.
Salud: los malos hábitos han llevado a una salud que pende de un hilo. Es preciso ir al médico y seguir sus consejos, de lo contrario sólo se logrará seguir sumando pequeños males que, con conducta y disciplina, podrían evitarse.
